Para ambas cosas os propongo una idea. Lo que veis arriba es un envase de vidrio que antes contuvo yogur. Lavado y bien seco. Se rellena con sal gorda, y se le incorpora primero una cucharada de alcohol. Alcohol del botiquín, sin más. Se remueve bien. Un rato más tarde se añade colonia de baño normal, de la que tengáis. Removéis de nuevo. Veréis que la sal se va licuando un poco, de manera que emite humedad. Primera parte conseguida.
Luego ponéis encima clavos de olor. El resultado es un aroma bastante suave aunque persistente para la habitación. Y a medida que la sal se licua, cierto grado justo de humedad.
Una vez la sal se compacte (y tarda bastante) solo se trata de lavar de nuevo el recipiente y repetir el proceso. Podéis experimentar cambiando olores y especias, sin olvidar que se necesita una base alcohólica en la sal.
Salen las cuentas: imaginaos un humidificador y un "tu casa huele bien", el primero conectado a la red eléctrica. Y los ambientadores no solo son química, sino carísimos.
Imagen propia, bajo la misma licencia que el blog.
Vaya. Siempre siempre se aprende algo.
ResponderEliminarLo probaré, gracias por la receta.
Besos
Gracias a ti por tu comentario, Myriam. Es muy barato, fácil de hacer,y funciona. Abrazos, y feliz semana.
ResponderEliminarMe encantó. Me gusta mucho el clavo de olor.
ResponderEliminarGracias y un abrazo.
Pues ya sabes, Búho Lector. Anímate a prepararlo, y luego nos cuentas.
ResponderEliminarPues qué remedio más curioso. Voy a probarlo...
ResponderEliminarUn saludo
El olor va mejorando en unos días, es un poco más intenso.Sí, estamos comprobando que funciona. Gracias por tu comentario, Carmen. Un saludo y buen viernes.
ResponderEliminarLo intentare , tras el covid he perdido el olfato y necesito recuperarlo . Gracias
ResponderEliminarSaludos Hortensia gracias por tu visita y esperamos que el truco te sirva un saludo.
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