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martes, 2 de enero de 2018

Los héroes de las cocinas.



Llegó un día a la que entonces era mi casa, como un regalo del Club de Lectores. Por supuesto, fue en Otra Edad del Mundo. Cuando no había Pc personal, quien sabía algo de informática alucinaba con MS2, no existían los teléfonos móviles en cada bolsillo, y quien tenía Tv y era estudiante la veía en blanco y negro. 1989. 

Todos hemos envejecido con mejor o peor aguante. Ella, la Taurus, sigue ahí. Sencillota, sin varillas intercambiables, capaz tan sólo de hacer una cosa, batir. Y hacerla bien. Acaba de preparar un puré de verduras que será cena. No se le puede dar mucha caña, se recalienta si trabaja más de tres o cuatro minutos del tirón. Yo no soy apresurado. Que vaya a su bola.

Un día, como todo lo mortal, hará 'puf' y se acabó. Vivediós que soy capaz de enterrarla. Ya no se hacen máquinas que no vayan a fundirse en dos años. Y esta ha estado primero conmigo, y luego con nosotros, casi treinta. La fiel infantería. Muchas gracias, batidora sin perifollos ni pretensiones, por ayudar a hacer la cena.


Nota: No hago publicidad. Es así, podía haber sido cualquier otra marca. Que dure treinta años, claro.




Imagen propia, bajo la misma licencia que el Blog.


8 comentarios:

  1. Yo también tengo una de esas, otra marca pero da igual. La tengo desde hace muchos años y no imaginas la de cosas que preparamos juntas.
    Besos

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  2. Me lo creo, Ambar. De antes de que se inventara lo de la "obsolescencia programada".

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  3. Los viejos compañeros de batallas son los que más resisten y nos recuerdan buenos momentos, y no solo provienen de la cocina. Un abrazo.

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  4. Muchas gracias, Ainhoa. Nos facilitan un poco la vida. Conste que ya sabemos que quien sustituirá en su día a Mama Taurus será un pasapuré manual. Pero mientras, genial.

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  5. La de mis padres, comprada cuando se casaron ha durado hasta hace un par de años. Las comparo a las impresoras básiucas de Hp.
    Un saludo

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  6. Cierto. Muchas gracias por tu comentario, Carmen. Las viejas máquinas casi eternas.

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  7. Yo todavía tengo la mía , muy básica , y que efectivamente tienes que batir a trozos, para que no se recaliente,... así lo aconsejaban las instrucciones... Ya está que cualquier día le toca, son , muy muchos los años en ejercicio de su labor, el críar 3 hij@s , y el poder con todo y más,... Cada vez que la cojo, rezo, para poder utilizarla una vez más,.... Y parece como que ella me contestase, ....anda guapa, déjame ya un ratico en paz. La separación será dolorosa seguro..... pero que tarde .... por favor.

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  8. Las máquinas simples son las que duran. Que la tuya dure tanto como para dejarla en herencia. Y si no,volveremos al pasapuré manual de toda la vida. Ese que hacía maravillas a golpe de muñeca.

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